TESTIMONIO DE JIM CAVIEZEL
Con ocasión de la promoción de su más reciente película sobre san Pablo, Jim Caviezel se presentó en la Cumbre de liderazgo estudiantil 2018 – SLS18, en Chicago y emocionó a los miles de jóvenes estudiantes que estaban presentes con un discurso sobre la fe y su
testimonio de vida.
Caviezel abrió el discurso hablando del significado de la palabra Saulo “grande” y Pablo “pequeño”. Y mencionó cuán importante es “ser pequeños para ser grandes”. “Ese es el camino de los santos, y esa fue la forma en que Saulo se volvió san Pablo”.
Compartió también su propia experiencia y cómo llegó a ser actor, enfatizando que fue una llamada que recibió del Señor.
Pero no todo fueron rosas, y su interpretación de Edmond en El Conde de Montecristo, personaje que lo catapultó a Hollywood, no fue nada fácil, pero aprendió de su personaje, que Dios “nos ama a cada uno de nosotros”, “incluso en nuestros momentos más oscuros” y aunque nosotros no creamos en Él.
Tras la filmación de El Conde de Montecristo, Mel Gibson invitó a Caviezel a interpretar el papel de Jesús en su película, La Pasión y dijo que “cuando estaba en la Cruz, me di cuenta que en el sufrimiento está nuestra redención, … y cada uno debe cargar su propia cruz”.
“Chicos, hubo mucho sufrimiento antes de la resurrección, su camino no será diferente, así que abracen su cruz y elévense hacia su meta”.
“El mundo necesita guerreros como san Pablo y san Lucas, quienes arriesgaron sus nombres, sus reputaciones para llevar su fe, su amor por Jesús al mundo”.
Casi al final de su discurso citó el poderoso discurso sobre la libertad de la película, ganadora del Oscar, Corazón Valiente, apelando a luchar con el Espíritu Santo y Jesucristo como escudo contra el mal y contra el diablo.
Finalizó bendiciéndolos y deseando reencontrarse con todos en el cielo.