EL RASTRO QUE DEJA UN SACERDOTE
Antesdeayer al mediodía fallecía un sacerdote muy conocido del Opus Dei, en una operación de corazón que salió bien, pero por un infarto Dios quiso llevárselo.
Tenía una gran concurrencia de personal en su confesionario, era muy comprensivo, amable, cariñoso, se ponía en las circunstancias de esa persona....por eso tenía personas de todas las edades como pude comprobar ayer.
Fuí a la Iglesia del Espíritu Santo a la misa de 11, y me encontré con una escena totalmente emotiva, además de que había mucha gente...la misa se ofrecía por Don Jorge, justo delante de su confesionario había toda una clase de 2º de Primaria de un colegio, que habían totalmente empapelado el confesionario con dibujos y mensajes de cariño para Don Jorge.
Ellas miraban con frecuencia al confesionario, y lloraban......aún no había leído lo que habían dejado, pero me imaginé. Estaban en situación de schock por la noticia inesperada del fallecimiento de su amigo.
Me hizo reflexionar, en lo que se suele denominar la Infancia espiritual..... sencillez, naturalidad, saber apreciar a los amigos, aquel en quien confiaban y les ayudaba, y fueron a decírselo a su manera.
Qué maravilla!!!!
Perder esa inocencia, ese modo de expresar lo que uno lleva dentro.....nos hacemos "mayores" y ya nuestros modos son más fríos, más calculadores, menos naturales.....
Le pedí a Don Jorge por sus penitentes, por aquellos mensajes que le dejaban: "Siga vigilándonos desde el cielo, te queremos, desde el cielo nos miras y nos sonríes, todo el mundo es diferente pero tu eres buena gente, Descansa en paz, no te olvidamos.......
Después de la Misa cuando ya se fueron, dieron un beso al confesionario; estaba tocada de ver esa escena, me acerqué leí, rece, e hice estas fotos.....son memoriales,
Gracias Señor, porque en esta tierra, ahora tan desolada y fría, aun hay almas que saben responderte a través de tus sacerdotes, ¡qué responsabilidad para ellos!!!!
Don Jorge, gracias por su ejemplo, gracias por su cariño, por su fidelidad, por su ejemplo de buen sacerdote, hay a mucha gente que la ha dejado un poco huérfana, pero usted seguirá desde el cielo cuidando de sus "ovejas" Descanse en paz, y disfrute de lo que tantas veces fue tema de su meditación estar con Jesús y María.
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