HASTA LUEGO.....PALOMA!!!!!
Conocí a Paloma, en el año 1976 en Málaga, donde nació. Me la presentaron y desde el primer momento sabía que seríamos buenas amigas...
Hicimos juntas unos días de retiro espiritual, donde hablamos largamente, y así se fue cimentando nuestra amistad. Nos veíamos con frecuencia, tenía tres hijos pequeños, y poca ayuda en su casa, con lo cual no le permitía hacer muchos planes, por lo que yo iba más a verla. Ahora ya son mayores, y ahí es donde te das cuenta cómo pasa el tiempo!!!!!!
Siempre pensé que sus padres que la llamaran Paloma, en su bautizo, era el nombre que mejor le podía ir, por su estilo, por su manera de ser, incluso por su tono de voz, y sus miras altas en su vuelo por la tierra. Transmitía paz serenidad, aunque hubiera momentos que sufriera, pero quería aceptar esa Voluntad de Dios.
Muchas cosas me enseñó, ella pensaba que yo le ayudaba, pero no, era ella la que me ayudaba a mí.
Al poco tiempo de conocernos, le salió el bulto maligno, que ya no le ha dejado vivir con tranquilidad, hasta el día 6 de Noviembre de este año. Se fue llena de paz y con un cielo bien asegurado.
No pude estar en Málaga, pero recordé muchas cosas, y pude hablar con Julio, su marido varias veces, lo agradecí mucho, pues al no estar allí se pasa peor, pero me ponía al corriente de su evolución, e incluso de esos momentos finales. ¡Gracias Julio!!!!
Tenéis una buena aliada en el cielo, y aunque su vacío y la dedicación que habéis tenido notareis más su ausencia, pero Dios os pagará ese buen servicio, de meter un alma en el cielo. Y para tus hijos el ejemplo de esa madre, será inolvidable.
Esta oración de San Agustín, la habrás oído, pero quiero recordarla, para cuando lleguen esos momentos más difíciles. ANIMO!!!!
No llores si me amas…
¡Si conocieras el don de Dios y lo que es el Cielo!
¡Si pudieras oir el cántico de los Ángeles y verme en medio de ellos!
¡Si pudieras ver desarrollarse ante tus ojos los horizontes,
los campos eternos y los nuevos senderos que atravieso!
los campos eternos y los nuevos senderos que atravieso!
¡Si por un instante pudieras contemplar, como yo,
la belleza ante la cual todas las bellezas palidecen!
la belleza ante la cual todas las bellezas palidecen!
¡Cómo! ¿Tú me has visto, me has amado en el país de las sombras
y no te resignas a verme y amarme en el país de las inmutables realidades?
y no te resignas a verme y amarme en el país de las inmutables realidades?
Créeme; cuando la muerte venga a romper las ligaduras,
como ha roto las que a mí me encadenaban,
y cuando un día, que Dios ha fijado y conoce,
tu alma venga a este Cielo en que te ha precedido la mía,
ese día volverás a ver a aquel que te amaba y que siempre te ama,
y encontrarás tu corazón con todas sus ternuras purificadas.
como ha roto las que a mí me encadenaban,
y cuando un día, que Dios ha fijado y conoce,
tu alma venga a este Cielo en que te ha precedido la mía,
ese día volverás a ver a aquel que te amaba y que siempre te ama,
y encontrarás tu corazón con todas sus ternuras purificadas.
Volverás a verme, pero transfigurada,
extática y feliz, no ya esperando la muerte,
sino avanzando contigo,
que me llevarás de la mano por los senderos nuevos de la luz y de la vida,
bebiendo con embriaguez a los pies de Dios
un néctar del cual nadie se saciará jamás.
extática y feliz, no ya esperando la muerte,
sino avanzando contigo,
que me llevarás de la mano por los senderos nuevos de la luz y de la vida,
bebiendo con embriaguez a los pies de Dios
un néctar del cual nadie se saciará jamás.
Enjuga tu llanto y no llores si me amas…
Lo que éramos el uno para el otro, seguimos siéndolo.
La muerte no es nada.
No he hecho nada más que pasar al otro lado.
Yo sigo siendo yo.
Tú sigues siendo tú.
Lo que éramos el uno para el otro, seguimos siéndolo.
La muerte no es nada.
No he hecho nada más que pasar al otro lado.
Yo sigo siendo yo.
Tú sigues siendo tú.
Lo que éramos el uno para el otro, seguimos siéndolo.
Dame el nombre que siempre me diste.
Háblame como siempre me hablaste.
No emplees un tono distinto.
No adoptes una expresión solemne, ni triste,
sigue riendo de lo que nos hacia reír juntos.
Dame el nombre que siempre me diste.
Háblame como siempre me hablaste.
No emplees un tono distinto.
No adoptes una expresión solemne, ni triste,
sigue riendo de lo que nos hacia reír juntos.
Reza, sonríe, piensa en mí, reza conmigo.
Que mi nombre se pronuncie en casa como siempre lo fue,
sin énfasis alguno, sin huella alguna de sombra.
La vida es lo que siempre fue: el hilo no se ha cortado,
¿Por qué habría de estar yo fuera de tus pensamientos?
¿sólo porque estoy fuera de tu vista?
No estoy lejos… tan solo a la vuelta del camino.
Que mi nombre se pronuncie en casa como siempre lo fue,
sin énfasis alguno, sin huella alguna de sombra.
La vida es lo que siempre fue: el hilo no se ha cortado,
¿Por qué habría de estar yo fuera de tus pensamientos?
¿sólo porque estoy fuera de tu vista?
No estoy lejos… tan solo a la vuelta del camino.
Lo ves, todo está bien…
Volverás a encontrar mi corazón, volverás a encontrar su ternura acendrada.
Volverás a encontrar mi corazón, volverás a encontrar su ternura acendrada.
Enjuga tus lágrimas y no llores si me amas.
Comentarios
Publicar un comentario