PERDÓNANOS SEÑOR.......


Hoy  vivimos  el   día  central  de  la  Semana  Santa;  Cristo  vino  al  mundo  para morir  en  la  Cruz  y  salvar  a  todos  los  hombres  del  pecado  original.

Es  un  día  especial  de  silencio,  recogimiento,  oración,  adoración  de  la  Cruz....todo  está  centrado  en  ella.




Recuerdo  en  mis  tiempos  de  juventud,  donde  gracias  a  Dios  había  mas  FE......este  día  no  había  radio,  sólo  sonaba  música  sacra,  como  señal  de  duelo,  y  en  general  las  mujeres  se  vestían  de  negro,  y  los  hombres  con  corbata  negra..... ahí  se  demostraba  ese  respeto  a  Cristo  que  muere  por  ti  y  por  mi.  
¿Hay  alguien  que  haya  vivido  ese  sacrificio?

Para  algunos  os  puede  parecer  exagerado.....no  me  voy  a  meter  en  inquisiciones,  pero  si  es  verdad  que  ese  ambiente  ayudaba...¿qué  ahora  hay  que  respetar  otros  modos,  de  pensar,  de  vivir,  de  actuar....?  vale.....  pero  respetar  también  vosotros  lo  anterior.



En  la  homilía  de  los  Oficios  del  Vaticano  decía  el  Padre  Cantalamesa: “Cristo en la cruz era el nuevo templo de Dios, de cuyo costado, como había predicho el profeta Ezequiel, brota el agua de la vida”, “¿por qué, esta ilimitada concentración de significado en la cruz de Cristo? ¿Por qué esta omnipresencia del Crucificado en nuestras iglesias, en los altares y en cualquier lugar frecuentado por cristianos?”.

 “Sólo en la cruz se hace manifiesto hasta dónde se abre paso esta capacidad infinita de auto-donación de Dios. ‘Habiendo amado a los suyos que estaban en el mundo, los amó hasta el extremo’”.
Además, subrayó que “en el año en que la Iglesia celebra un Sínodo sobre los jóvenes y quiere ponerlos en el centro de la propia preocupación pastoral, la presencia en el Calvario del discípulo que Jesús amaba, encierra un mensaje especial. Tenemos todos los motivos para creer que Juan se adhirió a Jesús cuando todavía era bastante joven”.
“Justamente nos esforzaremos en este año por descubrir qué espera Cristo de los jóvenes, qué pueden dar a la Iglesia y a la sociedad. Lo más importante, sin embargo, es otra cosa: es hacer conocer a los jóvenes lo que Jesús tiene que aportarles”.
Y  es  que  la  mentalidad  de  ahora,  es  que  los  jóvenes  "no  sufran"......que  equivocación,  en  el  dolor  uno  crece  fuerte,  maduro,  capaz  de  enfrentarse  a  lo  difícil......qué  diferencia.
La  juventud  de  hoy  es  muy  buena....pero  hay  que  saberla  orientar....está  desorientada  por  lo  que  ven  en  los  mayores....
Que  este  Misterio  de  la  Cruz,  nos  ayude  a  entender......

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