QUÉ HACE VALIOSA LA VIDA??????
¿Qué hace valiosa la vida? ¿Qué hace valiosa mi vida? En el mundo actual, la respuesta a esta pregunta gira a menudo alrededor de dos polos: el éxito que uno es capaz de alcanzar, y la opinión que los demás tienen de él.
No se trata, desde luego, de cuestiones banales: la opinión ajena tiene consecuencias en la vida familiar, social, profesional; y el éxito es la expectativa lógica de lo que emprendemos: nadie se pone a hacer algo con el objetivo de fracasar. Sin embargo, de hecho a veces en la vida hay pequeñas o no tan pequeñas derrotas, o sucede que los demás se forjan una opinión de nosotros en la que quizá no nos reconocemos.
La experiencia del fracaso, del desprestigio, o la conciencia de la propia incapacidad –ya no solo en el mundo laboral, sino incluso en el empeño por vivir una vida cristiana– pueden llevarle a uno al desánimo, al desaliento y, en último término, a la desesperanza.
En un mundo con tantas expectativas y desengaños ¿es posible aún vivir, como proponía san Pablo, «alegres en la esperanza»
Por eso exclamaba el Apóstol: «Si Dios está con nosotros, ¿quién estará contra nosotros? El que no se reservó a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, ¿cómo no nos dará todo con él?» (Rm 8,31-32).
De esa seguridad nacerá nuestro deseo de retomar el camino,. Sabiendo que muchas veces tropezaremos, que no siempre lograremos realizar lo que nos propongamos… pero que, en definitiva, no es eso lo que cuenta.
Hay una canción que cantan los montañeros cuando suben a la montaña. La canción dice así: “En el arte de subir, lo importante no es no caer, sino no permanecer caído”» Nosotros necesitamos tener esperanzas –más grandes o más pequeñas–, que día a día nos mantengan en el camino.
Qué difícil es andar el camino de cada día sin Dios.......