LO IMPORTANTE NO SON LAS COSAS......
¿Sabías que la memoria da prioridad a los recuerdos emocionales? Así es, la memoria es selectiva y almacena de manera preferente los recuerdos positivos y los que nos han cautivado emocionalmente por diversos motivos. Llegar al corazón es la mejor manera de regalar a los niños y al resto de la familia esta Navidad
Los recuerdos de acontecimientos emocionales —en especial los positivos— conllevan más detalles sensoriales (visuales, auditivos, olfativos) ligados al contexto (lugar, fecha) que los acontecimientos neutros. Las imágenes emocionales resisten mejor el paso del tiempo en la memoria y al estar más consolidadas, se conservan mejor a largo plazo. Las emociones estructuran nuestra memoria, de hecho después de pasar muchos años, recordamos esos días de Reyes, no lo que nos regalaron, aunque alguna cosa pase al recuerdo, sino cómo lo celebrábamos.....
Tenemos tendencia a recordar con mayor facilidad a memorizar los elementos o acontecimientos en un estado de ánimo semejante al que tenemos en el momento de evocarlas.
La felicidad de los niños no es proporcional a la cantidad de regalos que reciben, ya sea en Navidad, cumpleaños o cualquier otra celebración especial.
Es la época del año en la que los niños están más emocionados que nunca, están ilusionados, pero... si nos preguntáramos que es lo que hace que estén tan emocionados la respuesta sería fácil, ¡ los juguetes!. Y es que parece que la Navidad tiene dos caras, la del encanto de los valores que la caracterizan como la generosidad, la esperanza, el amor... y la del consumismo, donde lo importante son los regalos que recibimos.
Este año puedes hacer que sea diferente, puedes aprovechar estas fechas para empezar a transmitirle a tus hijos que lo importante no son las cosas sino no los momentos vividos.