CAMBIAR NO SE HACE CON VARITA MAGICA


El Papa Francisco hizo  una invitación a la conversión durante la homilía que pronunció durante la misa en la Casa Santa Marta. Y aprovechó este tiempo litúrgico para pedir que “no nos habituemos a vivir en las cosas feas” que “envenenan el alma”.



“No es fácil hacer el bien: debemos aprenderlo, siempre. Y Él nos enseña. ¡Aprended! Como niños. En el camino de la vida, de la vida cristiana se aprende todos los días. Se debe aprender todos los días a hacer algo, a ser mejores cada día. Aprender. Alejarse del mal y aprender a hacer el bien: esta es la regla de la conversión. Porque convertirse no es ir a un hada que con la varita mágica para que nos convierta. Es un camino. Es un camino de alejarse y de aprender”.

“Se aprende a hacer el bien con cosas concretas, no con palabras. Con hechos.

 Alejaos del mal, aprended a hacer el bien. ‘Pero tengo muchos pecados’. No te preocupes: si tus pecados fuesen como escarlata, se harán blancos como la nieve’. Y este es el camino de la conversión cuaresmal. Simple. Es un Padre que habla, es un Padre que nos quiere, nos quiere mucho. Y nos acompaña en este camino de conversión. Solo nos pide que seamos humildes. Jesús dice a los dirigentes: ‘quien se enaltezca será humillado y quien se humille será enaltecido’”.

En  un  querer  recomenzar  y  pedir  perdón,  hay  un  principio  de  "necesidad  de  cambio"  no  es  solo  un  movimiento  instantáneo,  que  no  perdura;  podemos  después  volver  a hacer  cosas  mal,  pero  queremos  recomenzar  y  no  importa  que  haya  cosas  que  hagamos  mal.

Hay  mucha  gente  buena  y  con  buenos  principios,  pero  son  incapaces  de  ponerlos  en  práctica  o  tener  una  continuidad  en  ellos......   esa  es  la  pena.

Miramos  mas  nuestra  satisfacción  personal,  que  la  satisfacción  interior  espiritual,  que  es  la  que  nos  va  a  ayudar  a  caminar,  con  paz  y  teniendo  seguridad  en  lo  que  vamos  realizando  cada  día.

Terminar  un  día  cansados  de  haber  hecho  mil  cosas,  pero  con  paz  interior...... no  tiene  precio.

Pide  esa  voluntad  esa  fortaleza,  que  nos  hace  falta  para  perseverar  en  el  bien.


Entradas populares de este blog

UNA ROSA EN EL LODO

DEJAR HUELLA