UN MILAGRO DE AMOR....

Ayer  en  algunos  sitios  de  España,  como  en  Sevilla,  Granada  y Toledo,  celebraron  la  Solemnidad del Corpus  Christi. En  España  se  celebra  este

  domingo,  con  sus  alfombras  de  flores.

Vi  por tv,  aunque también  la  he  vi  alguna  vez  allí  la  de  Toledo,  con  todas  sus  calles  engalanadas  y  con  romero  esparcido  por  el  suelo,  como  señal  máxima  de  acoger  por  esas  calles  al  Cuerpo  de  Cristo,  en  un  maravilloso  paso  de  orfebrería  del  autor  Arce  que  aún  la  hacía  más  solemne.  

Esta  festividad,  cada  uno  la  interpreta  de  muchas  maneras,  primero  por  su  fe  y  creer  que  en  esa  Hostia,  se  encuentra  realmente  el  Cuerpo  de  Cristo.  Si  no  lo  crees,  apaga  y  vamonos.

La  fe  nos  lleva  a  tener  una  actitud  de  adoración,  de  veneración,  de  agradecimiento,  de  respeto.....y  si  miras  un  poco  a  tu  alrededor.....la  emoción  sale  de  los  ojos  y  las  gargantas  de  esas  personas,  al  contemplar  esa  escena....Cristo  recorre  nuestras  calles,  sale  a  vernos,  a  que  Le  saludemos,  le  cantemos,  a  desahogar  nuestro  corazón  con  quien  sabemos  nos  ama.

Y  Cantamos  fuerte  "Cantemos  al  Amor  de  los  amores.....Dios  está  aqui..." esto  es  real.  "Yo  creo  en  Ti  Señor....."

Recordaba  el  año  2011,  cuando  Benedicto  XVI  vino  a  la  JMJ  en  Agosto,  a  Madrid  y  era  un  hervidero  de  gente  joven  y  no  tan  joven.  Y  concretamente  la  vigilia  de  oración  que  hubo  en  Cuatro  Vientos  (nunca  mejor  dicho  porque  volábamos)  rezando  precisamente  delante  de  esta  Custodia......aquello  fué  indescriptible.

Eramos  miles.....  pero  el  silencio  fue  de  fe!!!!

Luego  Benedicto  XVI  dijo:

"Sí, queridos amigos, Dios nos ama. Ésta es la gran verdad de nuestra vida y que da sentido a todo lo demás. No somos fruto de la casualidad o la irracionalidad, sino que en el origen de nuestra existencia hay un proyecto de amor de Dios.

 Permanecer en su amor significa entonces vivir arraigados en la fe, porque la fe no es la simple aceptación de unas verdades abstractas, sino una relación íntima con Cristo que nos lleva a abrir nuestro corazón a este misterio de amor y a vivir como personas que se saben amadas por Dios.

Si permanecéis en el amor de Cristo, arraigados en la fe, encontraréis, aun en medio de contrariedades y sufrimientos, la raíz del gozo y la alegría. La fe no se opone a vuestros ideales más altos, al contrario, los exalta y perfecciona.  No os conforméis con menos que la Verdad y el Amor, no os conforméis con menos que Cristo.

Os invito, pues, a permanecer ahora en la adoración a Cristo, realmente presente en la Eucaristía. A dialogar con Él, a poner ante Él vuestras preguntas y a escucharlo. Queridos amigos, yo rezo por vosotros con toda el alma..  Pidámosle al Señor en esta noche que, atraídos por la belleza de su amor, vivamos siempre fielmente como discípulos suyos. "

Persevera  en  buscar  esos  momentos  que  dan  fuerza  y  alegría  en  tu  vida-